miércoles, 17 de enero de 2018

Constantino y la religión

Pedro Conde Sturla

25 de abril de 2013



[La mayoría de los creyentes no sospecha, no tiene idea del papel jugado por el emperador Constantino durante el famoso Concilio de Nicea en la imposición “de los dogmas más fundamentales de la Iglesia católica”, no sabe que los cuatro Evangelios canónicos fueron impuestos por Constantino y que éste  “diseñó a su antojo lo que los católicos deberían creer por siempre acerca de la persona de Jesús” y que el credo católico no es de inspiración divina “sino de la nada santa coacción que ejerció el brutal emperador romano sobre hombres que Jesús hubiese despreciado.”
Estas son algunas de las mentiras fundamentales y fundamentalistas que Pepe Rodríguez, un erudito con nombre de bodeguero, expone en su libro “Mentiras fundamentales de la iglesia católica”. A continuación, en el fragmento seleccionado, se detallan los incidentes posteriores de aquel Concilio de Nicea que dio origen a la iglesia católica, la misma iglesia destinada a jugar desde entonces y por los siglos de los siglos un papel histórico de tanta relevancia. PCS]. 


El Concilio de Nicea


martes, 16 de enero de 2018

La Conferencia de Berlín y la repartición de África


Pedro Conde Sturla
9 de junio de 2014
África como botín de las potencias de Europa
La Conferencia de Berlín (1884-1885), de la cual se cumple casi 130 años, fue organizada por Otto von Bismarck, el canciller alemán, con la participación de las principales naciones europeas y el Imperio Otomano y tenía el sano propósito de establecer una carta de ruta para una colonización armónica del continente africano.

Nikolái Ovstrovsky: Así se templó el acero

8 de marzo de 2014 
[La edición cubana, en papel periódico, de la novela de Nikolái Ovstrovsky (1904–1936), era de cien mil  ejemplares y circulaba como un torrente en los años sesenta. Así se templó el acero fue una especie de paradigma para una gran parte de la juventud de esa época. Es la obra de un extremo idealismo, una biografía novelada del propio autor, un ucraniano, por cierto, que tiene como protagonista a Pavka (Pavel) Korchaguin, un muchacho que luchó en todos los frentes durante la revolución bolchevique y no conoció la vejez. (La malograda revolución bolchevique que intentó implantar el socialismo y degeneró en la pesadilla del bestialinismo).
Korchaguin fue herido de gravedad en combate y también enfermó de tifus, volvió a las filas y fue de nuevo herido, a consecuencia de lo cual quedó inválido, pero continuó trabajando en la medida de sus posibilidades por la revolución a la cual había consagrado su vida, no por Stalin. Finalmente quedó ciego y esto pareció ser el fin de su vida como revolucionario. Pero Korchaguin no se rindió. Dictaba artículos para diferentes medios y participaba en programas radiales. Luego empezó a escribir, con ayuda de una amiga, una novela, la novela de su vida. El relato de este episodio ocupa la página final de la obra y es sin duda el más intenso de todos. La lucha de la voluntad contra la adversidad, uno de los más luminosos ejemplos de idealismo, la lucha de un combatiente por volver a las filas que recuerda de paso el sacrificio de tantos dominicanos por las mejores causas.
Todo esto es coherente con la filosofía existencial que se expresa en estas hermosas palabras.
Ovstrovsky-Korchaguin
“Lo más preciado que posee el hombre es la vida, se le otorga una sola vez y hay que saber vivirla de modo que al final de los días no sienta pesar por los años pasados en vano, para que no exista una angustia por el tiempo perdido y para que al morir se pueda exclamar ‘toda mi vida y todas mis fuerzas han sido entregadas a la causa más noble en este mundo, la lucha por la liberación de la humanidad’”. Nikolái Alekséievich Ostrovski.

domingo, 14 de enero de 2018

El ajusticiamiento de Lilís

 3 de marzo de 2013 - 6:30 pm 


[La más conocida versión del ajusticiamiento de Ulises Hilarión Heureaux Lebert, alias Lilís (1845-1899), es de origen literario, o mejor dicho, histórico literario. La descripción de los hechos reales e inventados la hace Antonio Portocarrero, protagonista de la  célebre novela “La Sangre” (1914), de Tulio Manuel Cestero, una obra que recrea las vicisitudes de “una vida bajo la tiranía” y las tensiones sociales de finales del siglo XIX.

Se va Horacio, se va

Pedro Conde Sturla 
15 de febrero de 2014 
La historia repercute en la literatura y las artes y muchas veces es suplantada por éstas, cuando no por el mito, que es un fenómeno histórico literario, quizás el más antiguo de todos. El que da origen a los dioses y las religiones que son pura mitología.
En una ocasión escribí sobre el ajusticiamiento del tirano Ulises Hilarión Heureaux Lebert, alias Lilís, y aludí al hecho de que la fuente más socorrida de ese acontecimiento era la que describía Tulio M. Cestero en su novela “La sangre”. Es por cierto, la versión que recoge Sumner Welles en “La Viña de Naboth” y otros historiadores.

sábado, 13 de enero de 2018

La Celestina y el arte de la muela

Pedro Conde Sturla

 
En el habla de los cubanos, la palabra muela es a veces sinónimo de mucho elaborar y mucho hablar, casi como quien dice un arte o un artificio verbal, el arte de convencer o seducir a base de abundante elucubrar y razonar. (Algo que no se debe confundir con el simple hablar de la blandita).

jueves, 11 de enero de 2018

Merengue e ideología

Pedro Conde Sturla

viernes, 07 de agosto de 2009.

Carlos Marx definía la ideología como un conjunto de ideas y creencias, imágenes, representaciones, un falso concepto de la realidad –determinado históricamente- que la clase dominante elabora para su propio uso y consumo. Todo está contaminado de ideología. Una sociedad esclavista antigua como la de Babilonia produce y promueve el Código de Hammurabi como el perfecto instrumento regulador del orden establecido. Un orden que reduce a las masas a la condición de bestias de carga. El derecho romano responde a intereses de la más grande sociedad esclavista de la época clásica y justifica todos sus excesos. Los códigos napoleónicos responden a los intereses del capitalismo en expansión y a la necesidad de acomodarse al nuevo sistema. 

Dionisio el exiguo

Entre nosotros, el personaje más luminosamente exiguo es un gato con nombre de gato, pero con dientes de conejo, la criatura política más rapaz del patio, a excepción de su mentor y protector.


Pedro Conde Sturla
6 de agosto de 2014

[Algunos de los grandes personajes de la historia son tan humildes como Dionisio el Exiguo (460-550), es decir Dionisio el pequeño, Dionisio el enano. No se sabe si lo llamaban de esta manera por un defecto físico o para diferenciarlo de otros Dionisios. Su gran hazaña fue dividir las aguas de los tiempos en un antes y un después, un antes y después de Cristo. O sea, la fundación de la era cristiana.
Dionisio era un astrónomo y erudito y al parecer fue el papa Hormisda, viudo y padre de un hijo que sería el papa Silverio, quien le encargó establecer las fechas de unas festividades cristianas partiendo del nacimiento de Cristo y no de la fundación de Roma, como era costumbre, pero a la larga sus cálculos dieron origen al calendario por el que se rige una gran parte de la humanidad, a pesar de ciertos errores que ya se le han perdonado.
Los textos que siguen a continuación arrojan luz sobre este luminoso personaje. PCS].

miércoles, 10 de enero de 2018

El país perdido

Pedro Conde Sturla

06 de diciembre de 2012

Esta vez no voy a ironizar, no voy a hacer uso del sarcasmo, como es mi sana costumbre, no voy a llamar a Leonel Fernández Reyna por el título que se merece. No quiero que nada de lo que diga se pierda en lo que pueda parecer la burla de un oposicionista. Le llamaré ex Presidente con mayúscula, 
Yo no respeto las mayúsculas ni siquiera cuando se refieren a estado, rey y papa para desacreditarlas como símbolo del poder, y porque las palabras Obrero, Campesino -los productores de bienes materiales sin los cuales no podríamos subsistir- deberían ser las primeras con mayúsculas, aunque la Real Academia de la Letras no contemple esa posibilidad por razones de clase.
El Nueva York chiquito (que es para el ex Presidente una de sus grandes realizaciones) en que se ha convertido el polígono central del Gran Santo Domingo, como lo llaman, está enfermo de torres casi vacías, como se puede ver de noche. Han sido construidas en su mayoría con dinero del lavado de dólares, y a juicio de juiciosos arquitectos son tumbas de muertos vivientes que se van a desplomar o averiar con el primer leve movimiento de tierra que se produzca. Especialmente las flamantes torres del Malecón, que están construidas casi en el vacío, sobre una falla con cavernas donde penetra el mar. El mismo peligro corren  cientos de escuelas, escuelas del mismo tipo de las que colapsaron hace unos años con los moderados movimientos de tierra que ocurrieron en el Cibao.